
DISEÑADORES PIONEROS EN AMERICA LATINA
argentina
TOMÁS MALDONADO
(*25 de abril de 1922, Buenos Aires, Argentina - ), es un pintor, diseñador industrial y teórico del diseño argentino. Es conocido por su considerable influencia en el pensamiento y la práctica del diseño en la segunda mitad del siglo XX y es considerado como uno de los principales teóricos del llamado enfoque científico del diseño. Fue miembro fundador del Movimiento de Arte Concreto y uno de los protagonistas de la renovación plástica de la década de los 1940 en la Argentina.
Tomás Maldonado, consideraba al diseño como un proceso sistematizable de manera científica y no intuitiva. Consideraba que el diseño no es un arte y el diseñador no es necesariamente un artista. Las consideraciones estéticas ya no eran la base conceptual del diseño. El profesional diseñador sería entonces un "Coordinador", con la responsabilidad de coordinar con un gran número de especialistas, los requerimientos más variados de fabricación y del uso de productos.
Hasta la creación de la HfG de Ulm, el perfil profesional del diseñador aún no estaba definido. Incluso, en las publicaciones de la misma institución ni siquiera se usaba la palabra "diseñador". Aun así, Maldonado, en su conferencia dictada en 1958 en la Exposición Mundial de Bruselas titulada “Nuevos desarrollos en la industria y en la formación de diseñadores de productos” definió, no sólo los componentes de una formación adecuada en diseño, sino también las tareas y el papel del nuevo tipo de “diseñador de productos”.
Definición de diseño según Tomás Maldonado:
El diseño industrial es una actividad proyectual que consiste en determinar las prioridades formales de los objetos producidos industrialmente. La forma tiene por misión, no sólo alcanzar un alto nivel estético, sino hacer evidentes determinadas significaciones y resolver problemas de carácter práctico relativos a la fabricación y el uso. Diseño es un proceso de adecuación formal, a veces no consciente, de los objetos.
FUENTES:
Tomás Maldonado
http://historia-disenio-industrial.blogspot.com.co/2013/11/tomas-maldonado.html
César Janello
Buenos Aires, 1918 - Buenos Aires, 1985.
Arquitecto, diseñador, docente y teórico del diseño. Profesor de la cátedra de Composición Plástica y Director de la Escuela de Cerámica en la Facultad de Arte de la Universidad Nacional de Cuyo. Profesor de la Cátedra de Visión en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires. Creador de la Cátedra de Semiología Arquitectónica en la misma universidad. Director de Planeamiento de la Feria de América, Mendoza (1953- 1954).
Co-autor junto a Silvio Grichener del Puente de la Av. Figueroa Alcorta en Buenos Aires, proyecto que fue parte de la obra urbanística encargada a Jannello para la Exposición del Sesquicentenario de la Revolución de Mayo en 1960.
Autor del Diccionario de la Forma, obra reconocida a nivel internacional por sus aportes al estudio del color y la luz. Diseñador de emblemáticas piezas de diseño como las sillas K, Piola y W. La silla W, ícono del diseño argentino, fue creada con materiales de obra en la Casa del Puente proyecto de Amancio Williams; formó parte de proyectos de equipamiento para oficinas de Tomás Maldonado, del mobiliario para la Casa Curutchet de Le Corbusier y de las oficinas del planeamiento en la Feria de América, entre otros.
Desarrolló la "silla W" entre 1944 y 1951, la cual es hoy sin duda un ícono del diseño moderno argentino.
Fuentes:
http://www.ddaa.com.ar/2012/09/historia-silla-w-cesar-janello/
CUBA
Clara Porset
Clara Porset Dumas es considerada una de las más destacadas diseñadoras mexicanas del siglo XX, a pesar de haber nacido en Matanzas, Cuba el 25 de mayo de 1895, vivió y trabajó en México la mayor parte de su vida y su legado es hoy parte fundamental de la historia del diseño nacional.
Descendiente de una familia acomodada, Porset siempre tuvo interés en el diseño y las manualidades, y gracias a la posición familiar tuvo acceso a una educación internacional que influyó enormemente en sus diseño.
De la mano de Xavier Guerrero, Clara Porset visitó una gran cantidad de poblaciones en territorio mexicano. Supo acercarse al trabajo de los artesanos y logró apreciar los más pequeños detalles y las piezas más complejas. Observadora y tenaz, encontró en el butaque -asiento tradicional que en cada región tiene una versión distinta- una fuente de inspiración y constante experimentación.
Si bien otros diseñadores mexicanos como William Spratling y Héctor Aguilar en Taxco habían hecho ya algunas reinterpretaciones de los butaques fue Clara Porset quien los analizó formalmente a conciencia, realizando además, un profuso estudio ergonómico. Luego de varios años de experimentación, la diseñadora logró un interesante rescate cultural de este mobiliario.
Su análisis partió de entender cómo este asiento se enfocaba en el aprovechamiento de la madera, logrando la curvatura de patas, asiento y respaldo con tablas de pequeña sección que generaban poco desperdicio y se unían mediante un ensamble muy seguro gracias a la gran superficie de contacto entre las piezas.
Porset se percató de que la curva continua que integra el asiento y el respaldo es un elemento central que si esta mal trazado, impide la comodidad y la facilidad de uso. Experimentó con variantes en las dimensiones de la estructura y sustituyó el material usado en el asiento probando una gran variedad de tejidos de distintas fibras. A lo largo de varios años, se concentró en un proceso de cambio que implicó un análisis ergonómico de la estructura del butaque para modificarla, logrando diversas proporciones, acabados distintos y un interesante proceso formal.
Si bien los butaques son las piezas más representativas de esta diseñadora su trabajo no se limitó a ellos, experimentó con materiales como maderas locales y diversas fibras naturales, se inspiró en formas tradicionales pero también en las esculturas prehispánicas y en piezas de arte popular. Consiguió desarrollar un lenguaje propio que fue muy bien recibido en aquellos años. El arquitecto Luis Barragán, confió a esta diseñadora sus mejores obras para que desarrollará el mobiliario : Casa Gálvez (1954-55) y la propia casa-estudio del arquitecto en Tacubaya (1947) son un par de ejemplos donde no faltaron butaques, biombos y muebles para guardado.
FUENTES:
http://cral.in2p3.fr/artelogie/IMG/article_PDF/article_a228.pdf
MÉXICO
MICHAEL VAN BEUREN
Michael van Beuren nació en Nueva York, el 18 de marzo de 1911. Llegó a México en 1937 buscando nuevos horizontes y la posibilidad de ejercer como arquitecto no titulado. Primeramente pasó una temporada en Acapulco, y se hizo cargo de la construcción y el diseño de interiores de los bungalows del Hotel Flamingo’s, posteriormente se dirigió a la ciudad de México. Sus primeros trabajos en la capital fueron una serie de casas que llevarían los números 1, 2 y 3 en la calle de Liverpool.
Una vez acoplado al país, Van Beuren se dio cuenta de que sería difícil ejercer sin el título de arquitecto, pero que con su habilidad y conocimientos adquiridos en la Bauhaus, podría incursionar en el ramo mueblero y brindarle a la sociedad mexicana una nueva oferta de diseño, más acorde con los nuevos tiempos, y que se adaptaría a la arquitectura moderna que ya destacaba en el panorama.
En 1938 comenzó a diseñar muebles con su colega de la Bauhaus, el diseñador alemán Klaus Grabe, de esta forma crearon una pequeña empresa que operaba bajo el nombre de Grabe & Van Beuren.
Posteriormente Michael van Beuren creó Domus, su primera marca y probablemente la más conocida. Con ese nombre se abriría la primera tienda en el número 40 de la calle de Hamburgo en la década de 1940; esta compañía sirvió de paraguas a diversas marcas que inundaron el mercado mexicano con interesantes diseños y un enfoque mucho más internacional y moderno, dejando atrás el “estilo mexicano” que los intelectuales y artistas habían tratado de poner de moda en esta búsqueda frenética por una identidad nacional.
En 1941, Van Beuren participó en el concurso Organic Design for Home Furnishing (Diseño Orgánico para Mobiliario Habitacional), organizado por el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Este certamen por primera vez incluía a diseñadores latinoamericanos en su convocatoria. Esa ocasión la dupla formada por el matrimonio de Clara Porset y Xavier Guerrero y el terceto conformado por Michael van Beuren, Klaus Grabe y Morley Webb ganaron un galardón. Fue entonces cuando la chaise loungue a la que Michael había bautizado como Alacrán comenzó a comercializarse en Bloomingdale´s a un precio de 69.98 dolares.
En 1950 Fredderick T. van Beuren, hermano de Michael, pasó a ocuparse de la parte de producción del taller, con la intención de hacerlo más eficiente, de crecerlo con miras a convertirlo en una verdadera fábrica. Con su hermano dentro del organigrama, el negocio dejó de llamarse Domus –aunque se conservó la marca – para convertirse en Van Beuren S.A. de C.V.
Hacia mediados de aquella década, Van Beuren, S.A. de C.V. ya era capaz de producir en serie, lo que le permitía realizar varias líneas al mismo tiempo y también conservar una estupenda calidad.
Además de Domus, Van Beuren produjo otras líneas que resultaron muy exitosas y llegaron en el momento en que México buscaba la transición hacia una estética más internacional. Tal fue el caso de la marca Calpini de la que da cuenta la revista Espacios de 1951, y de Decapóls (1961), que con una fuerte influencia bauhausiana, fue una de las más populares durante aquel periodo y llegó a tener un gran éxito de ventas en almacenes como El Puerto de Liverpool.
Michael van Beuren siguió diseñando y se retiró a vivir a la ciudad de Cuernavaca donde falleció en 2004. Hoy sus muebles, representan uno de los momentos más fructíferos de la producción de mobiliario en el país, y han pasado a ser parte importante de la historia del diseño en México del siglo XX.
FUENTES:
http://www.franzmayer.org.mx/detallexpo.php?id=118&&tipo=anteriores
BRASIL
LINA BO BARDI
Lina Bo Bardi es italiana de nacimiento, formada en la Universidad de Roma y posteriormente se trasladó a Milán, en donde trabajó en la oficina del arquitecto Gió Ponti, encargándose de la revista Domus entre 1943 y 1946, fecha en la que se traslada a Brasil, donde fue una de las figuras responsables de la creación del Museo de Arte Moderno (MASP), y promotora de la Bienal de São Paulo. Junto a Giancarlo Pallanti fundó el Estudio Arte Palma, dedicado a la producción de muebles adaptados a las condiciones del coloso suramericano, empleando cueros y tejidos que resultaron del estudio de las casas de Pernambuco. Como resultado de dicha investigacion esta diseñadora hizo una silla en cuero y madera plegable y apilable para el auditorio del MASP, considerada el primer ejemplar que resumía el nuevo espíritu de los objetos “made in Brazil”, irónicamente proyectado por una extranjera.
FUENTES:
http://impecable.blogspot.com.co/2007/12/historia-del-diseo-industrial-en.html
BERNARD RUDOFSKY
Conocido por sus libros Architecture without Architects, Streets for People y The Prodigious Builders, Bernard Rudofsky (1905-1988) ha sido un significativo teórico, diseñador y en ocasiones, un severo crítico de los progresos de la época contemporánea. Su influencia en el ámbito del diseño ha sido enorme, especialmente en lo que se denominó diseño socio-cultural comparativo.
Como arquitecto, algunas de sus más destacadas creaciones se encuentran en Italia, Brasil y Estados Unidos y España. Su encuentro con nuestro país se producirá a partir de la década de los sesenta, momento en el que comenzó a visitar asiduamente nuestra geografía y a interesarse por las muestras de nuestra arquitectura popular.
Gracias a sus conexiones con José Guerrero en 1970-71 construyó la que sería su residencia/taller de verano en unas colinas situadas en el término de Frigiliana.
La Casa, que así era como el propio arquitecto denominó a la edificación, se levanta sobre un terreno muy escarpado con una variada vegetación autóctona, convirtiéndose en el eje a partir del cual Rudofsky desarrollaría toda su filosofía constructiva. Como señaló un crítico de la época: el propietario no sólo despreció la vieja costumbre de talar los árboles y nivelar el terreno sino que cuidó mantener el carácter rural del paisaje ( ) y rechazó todos los rasgos suburbanos tan apreciados por los extranjeros: falsos céspedes, macizos de flores y setos herbáceos; arcos, cancelas, vallas y muros.
La Casa, testamento ideológico y vital de Rudofsky, ha sido definida como sensual y espartana a la vez. Está compuesta por una serie de volúmenes autónomos entrelazados por una serie de patios interiores y exteriores, pérgolas y terrazas que, adaptados a los diferentes niveles del terreno, respetan la presencia de pinos, olivos y algarrobos.
Impulsor de proyectos, libros y exposiciones, Rudofsky llegó a construir poco. Es precisamente la singularidad y escasez de su quehacer arquitectónico, lo que pone de manifiesto la importancia y urgencia de proteger este legado de gran valor.
FUENTES:
http://blogcentroguerrero.org/2006/08/quien-es-bernard-rudofsky/